El diagnóstico temprano es un factor determinante para mejorar la supervivencia del cáncer de mama, la principal causa de muerte de las mujeres en todo el mundo. De la mano de la startup argentina Mamotest, la inteligencia artificial se convierte en una herramienta puntera para democratizar el acceso a este entre las pacientes de menos recursos.
La supervivencia al cáncer de mama a cinco años del diagnóstico varía notablemente entre diferentes países y regiones: mientras que la media de la OCDE se sitúa en el 85%, en países como Chile o Colombia se queda en el 75,5% y 72,1%, respectivamente. Entre los motivos que explican esta disparidad, denuncia la Organización Mundial de la Salud, el diagnóstico tardío es uno de los principales.
En 2020 se registraron 2,3 millones de nuevos diagnósticos y 685.000 muertes en todo el mundo debido a esta enfermedad. Ese mismo año se diagnosticaron 22.024 nuevos casos solo en Argentina, (el 16,8% del total, lo que lo convierte en el de mayor incidencia a nivel nacional), un país donde se producen unas 6.100 muertes anuales por esta patología.
Además, el acceso a servicios de diagnóstico, tratamiento y seguimiento «no es equitativo entre las diferentes zonas y grupos demográficos», afirma Alejandro Criado, ‘business operation manager’ de la startup argentina Mamotest. Para suplir esta carencia, la ‘healthtech‘ ha desarrollado una plataforma de diagnóstico y acompañamiento que, en colaboración con los hospitales, permite el estudio telemático y reforzado mediante inteligencia artificial (IA) de las mamografías para la detección precoz, una ventaja esencial en la carrera contra el cáncer.
Mamotest se inició hace más de 10 años en Corrientes (Argentina), gracias a la visión de Guillermo Pepe, CEO y fundador de Mamotest, y su padre, un reconocido médico y radiólogo de la provincia. En ese momento, el doctor Pepe tenía un negocio que incluía la gestión y propiedad de varios centros de imágenes: mamografías, ecografías y rayos X. Ambos detectaron la importancia de la prevención y la detección temprana del cáncer de mama, y vieron realidades muy dispares entre personas de distintos orígenes socioeconómicos, culturales o geográficos.
Entonces, Guillermo desarrolló la idea de una plataforma tecnológica que englobase todo el ‘journey’ de una paciente, desde su prueba hasta el acompañamiento en el tratamiento, en caso de detectar un elemento maligno. Así desarrollaron Bolder, una plataforma que utiliza IA para tratar el cáncer de mama y reducir la mortalidad de las mujeres. Una detección temprana conlleva una tasa de supervivencia del 97%, pero la cifra decae a un 30% o 35% tras una detección tardía en países en vías de desarrollo.
En Latinoamérica, todavía hay determinadas barreras sociales y económicas que impiden a las mujeres mayores de 40 años tomar su control ginecológico y mamario como rutina anual. Cuando los fundadores vieron mamografías de mujeres con estados avanzados de las enfermedades, pensaron la forma de lograr una democratización del acceso a la salud para personas que estuvieran en el sistema público. En Argentina, el sistema público de hospitales y centros es bajo en cuanto a la calidad y las mujeres deben esperar entre tres y cinco meses para conseguir una cita. Por ello, tenemos dos verticales de negocio, una de telediagnóstico y otra de navegación de pacientes con acompañamiento hasta un eventual tratamiento.
La IA permite acelerar los procesos del radiólogo que analiza una mamografía. Se fijan determinados parámetros de aprendizaje al algoritmo de IA para identificar y detectar circunstancias en los hallazgos recurrentes de una mamografía. El algoritmo aprende y valida de manera continua y sistemática. Así, el sistema genera certezas en base a ese aprendizaje y el médico valida con su ‘expertise’, generando un modelo más eficiente. Entre el 1% y el 3% de los estudios son hallazgos malignos, la IA advierte sobre ellos para que el médico preste atención y haga un análisis más detallado que confirme la predicción del sistema.
Mamotest firmó un acuerdo de ‘partnership’ con Amazon Web Services para estar en la nube, generar e implementar modelos. También ha trabajado sobre algunos ‘papers’ del modelo de la Universidad de Massachusetts (EE. UU). En Argentina, por ejemplo, tenemos centros propios y hemos cerrado convenios con Novartis en un proceso de gestión colaborativa con un hospital público en Buenos Aires. En México, pudimos conectarnos con Aries, un grupo del ecosistema de salud. Compartimos con esos centros nuestro modelo de ‘screening’, información y telerradiología para ser más eficientes.
Tras la pandemia, el mercado se retrajo y los fondos de inversión fueron más detallistas. Tenemos dos inversores principales, MSD y la Fundación Johnson & Johnson, que vieron en Mamotest la oportunidad de mejorar el acceso a la salud. En marzo cerramos nuestra segunda ronda de inversión semilla y en 2024 buscaremos nuestra serie A para desarrollarnos y expandirnos. El objetivo es ser un soporte tecnológico de trazabilidad y gestión del ‘journey’ de la paciente. Gracias a los desarrollos de Bolder, somos más atractivos para las próximas rondas que queremos impulsar, aun en el momento tan convulso del ecosistema de salud.
Estamos en pleno lanzamiento de nuestro HUB Imaging Solutions, un espacio donde confluyen tecnología, talento humano y velocidad de diagnóstico. Brindamos un servicio de alta calidad apuntalados en un equipo de médicos expertos en interpretación de un gran número de estudios, como mamografía, resonancia magnética, tomografía computada y radiología.
En la actualidad trabajamos con grandes empresas en España, México y Argentina, y estamos a punto de ingresar en el mercado en Brasil, Costa Rica, Chile y Perú. Para 2024 proyectamos sumar más países en LATAM e ingresar también en EE. UU.
Desde el punto de vista operacional, contamos con centros propios de diagnóstico que tienen dispositivos tecnológicos para hacer estudios, y esa tecnología hay que financiarla y renovarla continuamente. Tener un ‘partner’ como BBVA Spark, que apoye este tipo de iniciativas en el marco de una empresa de tecnología, es fundamental.
Guillermo me inspiró a poner el foco en una necesidad y detectar la oportunidad, estar convencido de un propósito y vencer las complejidades en la ejecución del programa. Tener equipos de profesionales y tecnología para lograr la eficiencia ayuda a otros a aprovechar las oportunidades. Enfócate en qué producto y oferta de valor tecnológica puedes brindar, y no te resignes ante las dificultades.
Conecta con mentores, colegas y clientes potenciales. Una red fuerte puede proporcionar apoyo, consejos y oportunidades invaluables a lo largo de tu viaje emprendedor. Y, finalmente, mantén tu mente abierta a nuevas ideas y enfoques. La capacidad de innovar te permitirá destacarte en el mercado y encontrar soluciones únicas a los desafíos que puedas enfrentar.