La ‘startup’ israelí Nummularii optimiza los procesos de asesoramiento de inversión para BBVA

Consciente de que ofrecer un servicio personalizado, especialmente a escala, a menudo puede ser costoso y lento, Nummularii, una ‘startup fintech’ B2B con sede en Tel Aviv, está reinventando la forma en que los asesores de inversión interactúan con sus clientes y les proporcionan servicio.

Fundada por el CEO Nir Nehmad en 2013, la empresa proporciona una plataforma basada en IA de última generación que automatiza los servicios de asesoramiento, lo que permite proporcionar a los inversores experiencias personales, sencillas y sin esfuerzo, con un asesoramiento de inversión personalizado y de alta calidad proporcionado a través de sus teléfonos inteligentes directamente desde su asesor de confianza en cualquier lugar y en cualquier momento.

Este enfoque en la optimización de la forma en que los asesores interactúan con sus clientes fue decisivo para que Nummularii fuera declarado ganador de la categoría de Gestión de Activos en el concurso Open Talent 2018 de BBVA, donde destacó por encima de más de 150 ‘startups fintech’.

Nehmad describió el triunfo como una “validación” para su empresa, y se mostró encantado cuando el banco encargó rápidamente una prueba de concepto para una solución que satisfaga las necesidades de sus propios asesores de inversión y de sus miles de clientes.

“Había una sensación de verdadero compromiso por parte del banco“, afirmó, “una verdadera motivación para crear una prueba de concepto que pudiera transformarse en un proyecto comercial de éxito”.

Cree que el toque personal es clave, ya que afirma que “los dueños de carteras quieren tener control sobre sus inversiones. Quieren tener acceso a un asesoramiento transparente, asequible y personalizado que sea fácil de entender, proporcionado por un experto humano en el que saben que pueden confiar”.

Juan del Corro, gestor de desarrollo de soluciones de BBVA, está de acuerdo: “La solución de Nummularii nos permite ofrecer a nuestros clientes un servicio más personalizado, lo que se traduce en una mejor experiencia general. Incluso a una escala tan grande como en la que operamos, podemos enviar alertas e información a los clientes de forma rápida y eficaz”.

En lo que respecta a la prueba de concepto, la mayor parte del trabajo pesado ya se había hecho. Según del Corro, “la solución de Nummularii ya estaba completamente desarrollada. Todo lo que necesitábamos hacer era adaptar ciertas características y hacer desarrollos aquí y allá para que se ajustara más estrechamente a nuestras necesidades”.

Nehmad encontró este proceso colaborativo enriquecedor: “Había estado viviendo y respirando esta ‘startup’ durante cinco años, así que conocía hasta el más pequeño detalle. Trabajar con las diferentes partes interesadas te ayuda realmente a ver cosas que nunca habías notado antes y a ajustar tu solución a cada una de sus necesidades”.

“Creo que es bueno para el banco pasar por el proceso desde cero también”, agregó. “Es útil para ellos ser capaces de identificar un problema y ver cómo una ‘startup’ puede abordarlo, y luego partir de ahí”.

Del Corro vio el proceso como algo igualmente valioso según sus afirmaciones: “Es muy enriquecedor trabajar codo con codo con ‘startups’ como Nummularii; se especializan en una necesidad empresarial muy específica, y nos han ayudado a centrarnos en un desafío en el que no podríamos haber trabajado por nosotros mismos”.

Todo se mueve rápidamente con BBVA. La prueba de concepto llegó a su fin en marzo de 2019, menos de un año después de que Nummularii ganara el concurso Open Talent. Satisfecho con el resultado, BBVA cree que, a largo plazo, la solución podría formar parte de su negocio diario. Inspirado por haber ganado el concurso y recibir la prueba de concepto, Nehmad piensa de manera optimista que, entre ellos, BBVA y Nummularii pueden convertir la solución de su empresa en un éxito comercial.