El producto mínimo viable (MVP, por sus siglas en inglés) consiste en el lanzamiento de un producto con sus características esenciales para testarlo en el mercado antes de su lanzamiento. Promovido por la metodología ‘lean startup’, se emplea para evaluar las necesidades y demandas de los clientes antes de desarrollar el servicio por completo, de forma que la empresa de alto crecimiento pueda ahorrar costes y esfuerzos innecesarios.
Pruebas de concepto, modelo de negocio, captación de fondos… El glosario del ecosistema emprendedor está compuesto por numerosos conceptos que sirven de guía para que los proyectos innovadores alcancen todo su potencial. Entre ellos se encuentra un término relevante para que las startups validen su idea: el producto mínimo viable (MVP, las siglas en inglés de minimum viable product), una de las bases del método ‘lean startup’, empleada para convertir una idea inicial en productos finales.
El producto mínimo viable es como se conoce a la versión básica de un producto o servicio que tiene como objetivo evaluar su acogida por parte del mercado. Este prototipo integra las características básicas y permite testar si el producto cuenta con las funcionalidades que pueden satisfacer las necesidades de los clientes, así como comprobar su interés por el mismo.
Desarrollar un producto mínimo viable ofrece varias ventajas a las startups:
Esto muestra que lanzar un producto mínimo viable es clave: si la recepción de los usuarios no es positiva, testar el prototipo ofrece la perspectiva a los emprendedores para decidir si deben cambiar el modelo de negocio de la compañía o afinar el producto o servicio para que su propuesta impacte en el mercado.
Para llevar a cabo un producto mínimo viable o MVP es necesario seguir algunos pasos:
Por último, para desarrollar un producto mínimo viable es recomendable tener en cuenta que este debe cumplir con cuatro criterios.
La creación de un producto mínimo viable supone un paso esencial para aquellas startups que quieren asegurar su crecimiento en el ecosistema emprendedor. A su impulso también ayudan las soluciones integrales desarrolladas por BBVA Spark, que ayuda a las empresas de alto crecimiento a impulsar su evolución.