El ‘confirming’ es un servicio por el que las entidades bancarias se ocupan de la gestión del pago de las facturas de una empresa. Para las ‘startups’ de alto crecimiento, este mecanismo ofrece toda una serie de ventajas como acceso a capital, seguridad financiera y más tiempo que dedicar a propuestas de valor.
Con el objetivo de que los emprendedores pongan toda su atención en áreas clave de su ‘startup’, existe un amplio abanico de servicios que facilitan y simplifican la gestión del negocio. Uno de ellos es el ‘confirming’, que, en esencia, permite a las empresas dejar en manos de una entidad bancaria o financiera la gestión de pagos a sus proveedores.
BBVA Spark, el mejor aliado de las compañías de alto crecimiento, ofrece este servicio de gestión de pagos como parte de su amplio catálogo de soluciones de financiación diseñadas expresamente para dar respuesta a las necesidades de los emprendedores. A través de este mecanismo, los proveedores obtienen una mayor seguridad en el cobro de las facturas y los fundadores de ‘startups’ y ‘scaleups’ pueden acceder más fácilmente a financiación gracias a la confianza que aporta una garantía de pago avalada por una entidad fiable.
Pero ¿cómo funciona exactamente este servicio, y qué beneficios aporta a las diferentes partes? A lo largo de este artículo, estudiaremos la definición, tipos y ventajas del ‘confirming’ como sistema de pago para empresas y proveedores.
En el ‘confirming’, la empresa cede a una entidad bancaria el control del proceso administrativo de pago de sus obligaciones financieras, con el fin de garantizar dichos pagos de forma oportuna. El banco, en representación de la empresa deudora, hace llegar las órdenes de pago confirmadas a la empresa acreedora y se encarga de cancelarlas en su fecha de vencimiento. Es decir, con el ‘confirming’ una entidad financiera asume la responsabilidad de garantizar que todas las facturas se paguen dentro de plazo, como un servicio administrativo externo contratado por la empresa.
Pero, además, este servicio permite al proveedor solicitar el cobro de los pagos de manera anticipada, a cambio de una comisión a la entidad por el adelanto de las facturas. Así, el ‘confirming’ puede ser una herramienta muy útil de cara a que los proveedores obtengan liquidez rápidamente.
El ‘confirming’ no debe confundirse con el ‘factoring‘, mecanismo mediante el que una empresa cede sus facturas a una entidad financiera, la cual le anticipa su cuantía a cambio de un coste de servicio y después se encarga de gestionar el cobro con el deudor. El ‘factoring’ ayudaría por tanto a aquellas compañías que necesiten liquidez a obtenerla por anticipado, sin tener que esperar a que sus clientes les paguen en la fecha de vencimiento de las facturas.
En resumen, el ‘factoring’ es un servicio de cobros, por el cual la empresa solicita al banco el pago anticipado de los pagarés que ha emitido para obtener liquidez; mientras que el ‘confirming’ es un servicio de pagos, que permite a una compañía delegar la gestión de sus facturas en una entidad financiera. Así, imaginemos por ejemplo una ‘startup’ que desea hacer más eficientes sus procesos de pagos a proveedores tras haberse retrasado en el abono de alguna factura. Para ello, contrataría una solución de ‘confirming’, gracias a la cual contaría con el apoyo de un tercero en este trámite y se aseguraría de cumplir con todas sus obligaciones financieras dentro de plazo.
Si no cuentan con los recursos administrativos y económicos necesarios, gestionar los pagos a proveedores puede suponer un reto para las empresas emergentes. Soluciones financieras como el ‘confirming’ ayudan a que los emprendedores mantengan sus facturas al día, entre otras ventajas.
Existen distintas modalidades de ‘confirming’ a disposición de emprendedores y empresarios, dependiendo de las condiciones pactadas con la entidad financiera en lo que respecta a quién asume el coste en caso de impago y cuándo se liquidan las facturas.
Como sistema de gestión de pagos, el ‘confirming’ presenta por tanto numerosas ventajas tanto para las ‘startups’ que contratan este servicio como para sus proveedores. Las empresas cliente se libran de la preocupación de gestionar la ejecución de sus facturas y de estar pendientes de las fechas de vencimiento, mientras que los acreedores disfrutan de la garantía o incluso el anticipo de los pagos.
Con una dosis extra de confianza y el saber hacer de BBVA Spark, esta solución supone una interesante opción para ‘startups’ y ‘scaleups’ que quieran simplificar los trámites del día a día para centrarse en lo realmente importante: hacer crecer su negocio.