El ‘hub’ innovador más destacado de Brasil y de toda la región presume de una fuerte presencia de unicornios, un potente sector ‘fintech’ y cifras récord de financiación en ‘startups’. El carácter cosmopolita, el tamaño del mercado interno y las redes de apoyo públicas y privadas también impulsan el emprendimiento en São Paulo, un ecosistema consolidado que continúa creciendo.
Conocida como «terra da garoa» («tierra de llovizna»), por su clima imprevisible y sus drásticas variaciones de temperatura, la naturaleza caprichosa del clima en São Paulo no se corresponde con el boyante ecosistema de innovación de la ciudad: estable, con un rápido ritmo de crecimiento y firmemente establecido como el mayor ‘hub’ de emprendimiento innovador de Brasil y de toda América Latina, así como el 16º en el ‘ranking’ global de Startup Blink. El ecosistema emprendedor de São Paulo está valorado en 108.000 millones de dólares. En comparación, el de Ciudad de México (el segundo más grande de Latinoamérica) se valora en 22.000 millones, según Startup Genome.
São Paulo es además el hogar de 12 de los 17 actuales unicornios brasileños (empresas que consiguen una valoración superior a 1.000 millones de dólares antes de salir a bolsa). Solo en 2021, dos unicornios brasileños dieron el siguiente paso: protagonizaron exitosas salidas a bolsa el neobanco Nubank y la plataforma de ‘e-commerce’ VTEX.
Además de las ‘startups’ de éxito, el acceso a capital es uno de los puntos fuertes de la urbe: las ‘startups’ brasileñas recaudaron una cifra récord de 9.430 millones de dólares a lo largo de 2021, un 165,63% más que en 2020, según datos de Distrito.
El Startup Ecosystem Report 2022 sitúa a São Paulo en el 4º lugar de la clasificación mundial en el ámbito ‘fintech’. Las empresas de este sector dominan el panorama ‘startup’ de la ciudad, con un total de 166 basadas en São Paulo. Además, captaron más de un tercio del total de inversión en 2021. También es el sector que más financiación ha recaudado en el primer semestre de 2022, si bien los proyectos emergentes brasileños comienzan a percibir una caída en las inversiones.
Para Gabriel Pereira, especialista en ‘open banking’ de la ‘startup’ brasileña TruePay, el sector ‘fintech’ se encuentra en un nivel de madurez mayor que los demás en São Paulo y, por tanto, está más preparado para afrontar posibles problemas económicos. «Nuestro ecosistema financiero, nuestros bancos y nuestra infraestructura son un modelo para muchos lugares del mundo. Tenemos iniciativas pioneras como el sistema de pagos digitales PIX, un sólido sector crediticio y nuestras ‘fintech’ son más fuertes que la media porque han recaudado mucha inversión».
En este sector destacan especialmente los neobancos, entidades financieras que ofrecen sus servicios de manera 100% digital, como el ya mencionado Nubank o el reciente unicornio Neon. Este último alcanzó dicho estatus en febrero de 2022 tras una inversión del BBVA por valor de 300 millones de dólares, un buen indicador del prometedor futuro de estas innovadoras propuestas financieras.
A las ‘fintech’ le siguen en importancia las iniciativas de ‘e-commerce’ y ‘proptech’ (que aplican tecnología al sector inmobiliario), como los unicornios QuintoAndar, dedicada a la compra y el alquiler de viviendas, y Loft, destinada a la compraventa de propiedades. Otros proyectos notables también se están abriendo hueco en los campos de la agricultura, como Agrolend, el «Nubank para los agricultores«, o la educación, con plataformas como Descomplica.
¿Qué ha hecho São Paulo para erigirse como líder de innovación entre las metrópolis latinoamericanas? Estas son algunas de las claves que señalan los expertos:
Las ‘startups’ de São Paulo también se benefician de aceleradoras, incubadoras y otras iniciativas destinadas a nutrirlas. Destaca entre ellas la aceleradora Latitud, una plataforma que apoya a los fundadores en fase inicial con formación a través de un programa selectivo de becas, ofrece recursos a medida para las ‘startups’ locales como Latitud Go y ya ha invertido en más de 90 empresas de la región. «São Paulo es una ciudad enorme, profesional y cosmopolita, y su ecosistema de ‘startups’ está mucho más desarrollado que el de la mayoría de ciudades latinoamericanas», señala Gina Gotthilf, cofundadora y COO de Latitud. Pero matiza: «Emprender en São Paulo puede ser difícil debido a la notoria inestabilidad política y económica de la región, especialmente teniendo en cuenta las fluctuaciones del real brasileño frente al dólar».
El sector público también contribuye a dinamizar el panorama emprendedor: Brasil cuenta con una ley ‘fintech’, el Gobierno brasileño ha creado el Marco Legal de las Startups y el Banco Central de Brasil ha lanzado un ‘sandbox’ regulatorio nacional (un espacio de pruebas para nuevos modelos de negocio que aún no cubre la normativa vigente). El Ejecutivo nacional también desarrolla iniciativas para impulsar el ecosistema de ‘startups’ como InovAtiva, y a nivel local destacan proyectos como Desenvolve SP, que ofrece facilidades de crédito a las empresas de São Paulo, o PIPE-FAPESP, que apoya la investigación tecnológica de las pymes.
La oferta formativa y la capacidad de atraer talento a la ciudad también juegan un papel importante en el clima innovador de la urbe, destaca Ricardo di Lazzaro, fundador de la ‘startup biotech’ Genera. «Tenemos gente muy capacitada y algunas de las mejores universidades de Latinoamérica. Yo estudié en la Universidad de São Paulo, y muchos de los fundadores de los unicornios también», afirma el investigador, reconocido entre los innovadores menores de 35 años en Latinoamérica por ‘MIT Technology Review en español’. «Por ser un centro para el trabajo, el estudio y la tecnología, mucha gente de todo el país se concentra acá. Numerosos emprendedores globales son de São Paulo, como los cofundadores de Facebook e Instagram [Eduardo Saverin y Mike Krieger], porque tenemos una educación muy buena».
La combinación de redes de apoyo públicas y privadas, ‘hubs’ de emprendimiento y talento sin fronteras ha dado lugar a un sólido ecosistema ‘startup’, tan maduro como para aguantar el envite de los desafíos futuros. La capacidad de las empresas emergentes de aprovechar las fortalezas locales y despertar el interés global ha llevado a la ciudad, por la que trotan numerosos unicornios, a destacar en toda la región. Con los ingredientes necesarios y una receta perfeccionada, São Paulo defiende su liderazgo en la alta cocina de la innovación.